Cristina Morales consiguió retener su cinturón de campeona mundial de K1 de la organización ISKA, en 48 kg, tras imponerse en el pabellón de Encinarejo de Córdoba a la belga Oumaiima Ahrou, por puntos con decisión unánime de los jueces, en combate que mereció de principio a fin.
Cristina consigue su segundo título mundial, haciendo historia en su localidad natal ante unos 1.200 espectadores. Fue de menos a más y salió desde el inicio a imponer un fuerte ritmo a su rival, a la que fue doblegando asalto tras asalto debido a su empuje y a su excelente preparación física, que la belga no pudo igualar. Los mejores golpes llegaron de parte de la española, que acorraló a la belga en los últimos minutos. FUENTE