Los Miami Dolphins pasan a ocupar la séptima plaza de la conferencia AFC, último lugar que da derecho a clasificar a los Playoffs. Obtuvieron su séptima victoria consecutiva (8-7) remontando de forma apoteósica el récord de 1-7 con el que iniciaron la temporada. Batieron por 20-3 a los New Orleans Saints donde le tocó debutar al quarterback rookie Ian Book. Es la primera vez que la franquicia de Florida cosecha una racha de siete triunfos seguidos desde 1985, años de Dan Marino.
A los de Louisiana sin embargo se les aleja los Playoffs al ponerse con balance negativo (7-8) y se ponen en el 10º lugar de la NFC. Los Saints no podían contar aún con el lesionado Jameis Winston, y por protocolo Covid-19, tampoco podían estar ni Taysom Hill ni Trevor Siemian. Así, ante este solar en el puesto de quarterback, le tocaba estrenarse al novato Ian Book de cuarta ronda. Y la verdad que no pudo tener un estreno placentero.
La defensa de los Dolphins, una pesadilla para Ian Book
En su segundo pase en la NFL, Book se veía interceptado por Nik Needham quien pudo correr en solitario para completar un pick six de 28 yardas y abrir el marcador del partido. El joven QB solo pudo intentar 20 lanzamientos y completaría únicamente doce, para 135 yardas.
La tensión del primer partido para Book y la presión defensiva de los Dolphins no iban a dar tregua al rookie. Los de Miami conseguirían 8 sacks en el partido, un par de ellos de Emmanuel Ogbah y 1'5 sacks de Jerome Baker. Mientras tanto, Tua Tagovailoa se desenvolvía a la perfección minimizando errores (198 yardas, 19/26 pases completados), siendo muy certero y seguro en sus envíos y dando muchos snaps a los corredores Duke Johnson y Phillip Lindsay. Cada uno corrieron en 13 ocasiones y rondaron las 75 yardas entre ambos. Suficientes para doblegar a unos Saints débiles en ataque.
En el primer cuarto Jason Sanders conseguiría un field goal de 48 yardas, después de que Marcus Davenport atizara con un gran sack a Tagovailoa con fumble. Aunque el OT Liam Eichenberg salvó el balón y Miami podría ponerse en 10-0.
Kamara, la única baza en los Saints
Ian Book soltó los nervios en el segundo cuarto y, junto a los running backs Alvin Kamara y Mark Ingram, pudieron progresar hasta la yarda 20. Una big play de Kamara recibiendo un balón para 27 yardas sería determinante. No obstante, en un 3&2, el intento terrestre no surtió efecto. Al igual como en todos los terceros downs que iban a tener los Saints en este encuentro. No lograron convertir ninguno. El kicker Brett Maher puso los tres únicos puntos de su equipo desde la yarda 38.
Antes de llegar al descanso, Miami volvió a amenazar en campo rival, pero estando en tercera oportunidad, un sack de Cameron Jordan complicaría el field goal que intentaría Sanders. Sería de 59 yardas y no lograría conectarlo, yéndose el balón hacia la derecha de los palos (10-3).
En el tercer cuarto, Tagovailoa sufriría el único escollo que tendría en este partido, enviando un pase complicado al centro del campo que se vería interceptado por Marshon Lattimore. Pero los Saints no eran capaces de salir del tercer down. Así, posteriormente, los Dolphins empezaron a abrir brecha con un drive de más de 80 yardas avanzadas. Un extraordinario pase profundo conectado con Mack Hollins de 40 yardas y otra big play de Jaylen Waddle, el destino favorito de Tua (10 recepciones para 92 yardas), catapultaron el drive. Finalmente estando en tercer down sobre las últimas cinco yardas, una falta por Roughing the Passer evitó el cuarto down y convirtió la situación en primera y gol. Trick play con Tagovailoa dando el balón a Waddle y touchdown del receptor rookie para el 17-3.
Tagovailoa lidera a los Dolphins hacia Playoffs
Los Saints ya empezaban a ir a contrarreloj, pues íbamos iniciando ya el último cuarto. Llevaban un horroroso 0/9 en terceros downs, y se jugaron un cuarto a una yarda sobre su 38 en el que Book, sin opciones, tuvo que lanzar a la banda. Esa buena posición de campo la rentarían los Dolphins con un nuevo field goal de Sanders, de 34 yardas para el 20-3.
Después, los de Sean Payton estuvieron en un 3&20 donde apostaron por una carrera de Kamara que, sin embargo, se quedó a solo una yarda del primer down. En esa ocasión, Book corrió para ganar tres yardas y alargar el drive. No obstante, después se verían encapsulados en un 3&31 tras dos sacks consecutivos, de Zach Sieler y Ogbah.
Tras el despeje de los Saints, Miami se puso a gastar tiempo con carreras de Johnson, dejando el reloj en menos de cinco minutos y prácticamente sentenciado el partido en más de dos anotaciones de diferencia. Para colmo, el punter Michael Palardy lograba un punt sobre la yarda uno.
Aunque Book supo salir de su endzone con una big play de Lil'Jordan Humphrey, quien se zafó de la defensa en solitario por 56 yardas, cuatro jugadas después el QB rookie sería interceptado nuevamente. Brandon Jones lograría el turnover a unos tres minutos del final que prácticamente finiquitó el partido.