Mientras las manecillas del reloj se acercaban inexorablemente hacia la media noche, la hora que marcaba la expiración del contrato de Punk con la WWE, Mr. McMahon se revolvía inquiero durante el combate que enfrentaba a la superestrella de las cosas bien hechas con el Campeón de la WWE John Cena, una cita en la que la apuesta no podía ser más alta.
Punk logró escapar entre la multitud con el título de la WWE y sus 63 años de historia, volviéndose hacia Mr. McMahon y lanzándole un beso de despedida.
Tal y como prometió, CM Punk se ha ido y se ha llevado el título de la WWE hacia un futuro que ni el mismo conoce. Pero, ¿qué pasa con John Cena? Después de haber sufrido uno de sus momentos más difíciles, el exMarine debe recuperar el equilibrio en un futuro que se presenta sin el Campeonato de la WWE, sin el enfrentamiento en WrestleMania XXVIII con The Rock, y sin nada de nada en la WWE, asumiendo que el Presidente mantiene su palabra.
Sea lo que sea lo que llegue en el futuro, todo ocurrirá en un paisaje alterado en la WWE: sin CM Punk, sin Campeonato de la WWE y tal vez sin John Cena, una visión que nadie podría haber creído en el pasado que iba a ver.
Por otro lado, durante una feroz batalla que podría haber sido para cualquiera, Christian escupió en la cara del campeón. La afrenta llevó a Orton a dar un golpe bajo al Capitán Carisma, pero esa acción llevó a Orton a una descalificación inmediata. Y, de acuerdo con la estipulación especial del combate que habían añadido los abogados de Christian, Orton perdió su título.
Después, La Víbora lanzó un ataque brutal sobre el nuevo campeón, rompiendo primero una pantalla de televisión contra su cabeza y lanzándole a continuación contra la mesa de comentaristas con un RKO.
Pero eso no fue suficiente para el ya excampeón. Mientras se marchaba cabizbajo del pabellón, Orton dudó, se dio cuenta de que aún no se sentía del todo bien y se dirigió de nuevo a por su rival, propinándole otro RKO aún más duro que el anterior que dejó a Christian definitivamente KO.
