Eran las 14:19 del pasado 6 de agosto cuando el Bribón XV se proclamaba matemáticamente ganador de la 30 Copa del Rey-Audi Mapfre logrando un triunfo histórico: el sexto -récord absoluto- de la saga del Bribón en la que era su última singladura en la bahía de Palma y en la Copa.
Sólo cruzar la meta, el armador barcelonés José Cusí conectó su móvil y ya tenía una llamada perdida del Rey Juan Carlos, que había seguido la manga con unos prismáticos desde el Palacio de Marivent.
"Felicito a todo el equipo. No te quepa duda de que, de haber estado a bordo, hubiera llorado de emoción". Esas fueron la palabras del monarca, que durante tres décadas y media ha sido el patrón del barco. FUENTE