Un solitario gol de Eddy Ockenden, a once minutos del final del encuentro que se disputó en Auckland, acabó con las opciones de España, después de haber tuteado a Australia y de haber tenido opciones de victoria.
Los australianos, actuales campeones del mundo, sumaron su duodécimo triunfo en la competición, el cuarto consecutivo, completando igual que el año pasado un torneo perfecto con seis victorias en otros tantos partidos.
La selección española salió sin complejos y David Alegre fue el primero en avisar a los campeones del mundo, pero su disparo se marchó al exterior de la portería de Andrew Charter. FUENTE
