Soberbio con el servicio, con el que no cedió ni una sola bola de rotura, y con el que cerró el encuentro con su quinto saque directo, y contumaz y efectivo con la derecha, la lucha entre el que hoy dejará de ser número uno del mundo y el que lo será a partir del lunes, se decantó a favor de Djokovic para imponerse en una hora y 26 minutos.
Con esta victoria, Djokovic corta en seco la racha de tres derrotas consecutivas que Nadal le ha infligido este año, en las semifinales de Roland Garros, en la misma ronda del Masters 1000 de Montreal y en la final del Abierto de Estados Unidos.
Djokovic necesitaba ganar en China y así no perder esperanzas con vistas a recuperar el número 1 a final de temporada. Para Nadal ganar al serbio en Pekín, donde nadie ha sido capaz de hacerlo en cuatro años, también era importante.
Hoy Rafa tuvo el día negro. Le falló su derecha, estuvo algo lento al principio y cometió más errores de lo normal. No pudo nunca romper el servicio de "Nole", ni siquiera optar a hacerlo, y por contra entregó el suyo dos veces, siempre al principio de cada manga.
A pesar de los problemas de espalda que mostró en semifinales contra la polaca Agnieszca Radwanska, Serena se mostró inabordable en la final, y eso que Jankovic es junto con su hermana Venus, la única jugadora en activo que acumula cuatro victorias ante la número uno de la WTA. Acabó con la serbia con un duro 6-2 6-2. FUENTE