
En el primer tiempo los costarricenses comenzaron a tope, asustando la portería de Buffon quien regresó a la titularidad. Abate, que entró en el once titular en este partido, no parecía convencer y Bolaños, Duarte, Bryan Ruiz y Campbell se aprovechaban de la defensa algo rota en este partido.

Finalmente, la sorpresa se efectuaba con un gol de Bryan Ruiz que hundía a Prandelli y compañía: justo antes del descanso, tras un enorme centro desde la izquierda de Junior Díaz, la pelota cayó sobre la cabeza de Bryan Ruiz que resolvió con ayuda del larguero, y dio la ventaja tan merecida a su selección.

La segunda parte, después de un partido que parecía estar ausente de riesgos absolutos, se mantenía en la línea. Italia no tenía al mejor Andrea Pirlo, y los cambios no aportaban mucho: Cassano, Insigne y Cerci no mejoraron en sí el juego italiano que andaba sin cerebro. Además, las numerosas faltas de Costa Rica evitaban jugadas claras de gol, contando además que la zaga costarricense provocó hasta 11 fuera de juegos. Los "ticos" supieron muy bien aguantar la ventaja para la victoia.