El Real Madrid cerró con mayor eficiencia los caminos hacia su canasta y se encomendó a Sergio Llull (20 puntos, 4 asistencias) y Gustavo Ayón (19 puntos, 6 rebotes, 28 de valoración) para ganar de forma contundente (70-90) el segundo partido de la final de la Liga Endesa y empatar la serie, que ahora viaja a Madrid.
El choque arrancó trepidante, con los blancos dominando gracias a la inspiración de Llull: 13 puntos en el primer parcial y una gran complicidad con Thompkins y Ayón. El acierto en ataque se complementó con una fortaleza defensiva que no se vio en el duelo que abrió la serie, especialmente en el rebote (12-28).
La intensidad atrás continuó tras el paréntesis, esta vez con Felipe Reyes y Sergio Rodríguez. La ventaja se fue a los 21 puntos, pero un triple de Perperoglou detuvo la hemorragia y cambió la inercia, con el Palau más involucrado. Una mayor agresividad en el rebote y acierto en el tiro exterior llevó al Barcelona a ponerse 10 puntos abajo, ayudado por la precipitación de sus rivales. Muy fallón se mostró Carroll, tampoco Rudy Fernández sumó, aunque reservaba su artillería. Los de Pascual llegaron vivos al intermedio: 32-44.
En el tercer cuarto compareció otro ilustre casi inédito, Juan Carlos Navarro: un triple suyo encendió la grada y puso al Real Madrid a tiro mientras Pablo Laso se desesperaba. Perperoglou siguió a lo suyo, y si no se consumó la remontada en estos minutos fue porque Llull y Ayón mantuvieron en pie a los blancos. Un triple de Thompkins consumó un parcial de 0-9.
El Barça sufrió un cortocircuito y se produjo un parcial de 1-12 que resultó demoledor. Rudy y el Chacho empezaron a enchufarla y ya no hubo debate.
1º CUARTO
El choque arrancó trepidante, con los blancos dominando gracias a la inspiración de Llull: 13 puntos en el primer parcial y una gran complicidad con Thompkins y Ayón. El acierto en ataque se complementó con una fortaleza defensiva que no se vio en el duelo que abrió la serie, especialmente en el rebote (12-28).
La intensidad atrás continuó tras el paréntesis, esta vez con Felipe Reyes y Sergio Rodríguez. La ventaja se fue a los 21 puntos, pero un triple de Perperoglou detuvo la hemorragia y cambió la inercia, con el Palau más involucrado. Una mayor agresividad en el rebote y acierto en el tiro exterior llevó al Barcelona a ponerse 10 puntos abajo, ayudado por la precipitación de sus rivales. Muy fallón se mostró Carroll, tampoco Rudy Fernández sumó, aunque reservaba su artillería. Los de Pascual llegaron vivos al intermedio: 32-44.
En el tercer cuarto compareció otro ilustre casi inédito, Juan Carlos Navarro: un triple suyo encendió la grada y puso al Real Madrid a tiro mientras Pablo Laso se desesperaba. Perperoglou siguió a lo suyo, y si no se consumó la remontada en estos minutos fue porque Llull y Ayón mantuvieron en pie a los blancos. Un triple de Thompkins consumó un parcial de 0-9.
4º CUARTO
El Barça sufrió un cortocircuito y se produjo un parcial de 1-12 que resultó demoledor. Rudy y el Chacho empezaron a enchufarla y ya no hubo debate.