Por fin arranca la emocionante aventura de los Playoffs, y en la temporada 2017/2018 de la NFL lo hará este sábado a las 22:35 (hora española) con un duelo inédito en postemporada que no sucedía desde 1994. Los Kansas City Chiefs (10-6), cuartos de la Conferencia Americana, recibirán a los Tennessee Titans (9-7, quintos en la AFC) en la primera Wild Card.
El ataque, la principal baza de los Chiefs
El Arrowhead Stadium tratará de seguir dando fuerzas a su equipo que tanto lo ha necesitado en la recta final de la regular season para no dejar escapar los Playoffs. A pesar de iniciar la temporada como los mejores de toda la AFC como invictos con cinco victorias seguidas,
los Chiefs se sumergieron en una racha negativa donde perdieron fuelle
tanto en ataque como en defensa, cediendo en seis de siete partidos
comprendidos entre las jornadas 6 y 13.
Sin embargo, en el momento de la verdad, Kansas City recuperó al mejor Kareem Hunt, al running back novato
que había sido el verdadero protagonista de la ofensiva en el inicio de
la temporada, y salieron triunfadores en sus cuatro últimos partidos
cuando peligraba más que nunca la AFC West.
Dejaron a su paso a los Raiders, Chargers, Dolphins y, ya sin nada por
decidir, a los Denver Broncos, para repetir liderato en su división.
Kansas City ofrecerá un destacado “Big-Three” en ataque conformado por Alex Smith (4042 yardas, 26 pases de TD y 5 intercepciones en toda la temporada, con el mejor rating, 104’7), el tight end Travis Kelce (1038 yardas con 83 recepciones de las cuales 8 en la endzone) y Kareem Hunt (1327
yardas recorridas en 272 acarreos para 8 TDs), ante un equipo que su
principal factor es la defensa, esencialmente la detención del juego
terrestre (finalizaron como el cuarto equipo que menos yardas ha
permitido por carreras, 88’8 por encuentro).
Los Titans, inmersos en dudas pero con una gran defensa
Los Tennessee Titans, por su parte, también han realizado una campaña muy dubitativa, e increíblemente accedieron a la postemporada perdiendo tres de sus últimos cuatro enfrentamientos. Únicamente superaron a los Jaguars ya en la Week 17 y gracias a una intercepción del safety Kevin Byard que definió el partido, para cerrar con 8 INTs para él la regular season.
El equipo de Mike Mularkey ha vuelto a los Playoffs 9 años después, pero con una ofensiva que posee a un único líder, Marcus Mariota. El quarterback parece
haberse asentado definitivamente en su tercera campaña, cometiendo
menos fallos y asegurando más lanzamientos, aunque, pese a ello, no
posee ningún receptor despuntante que lo ayude en los partidos.
De esta forma, el ataque de los Titans no parece ser una seria amenaza a la defensa irregular de los Chiefs
(la 5ª peor defensiva de la temporada, permitiendo una media de 365’1
yardas por partido). Mariota ha completado el 62% de sus pases, lanzando
para 3232 yardas con solo 13 touchdowns, y ha sido interceptado en 15 ocasiones. El TE Delanie Walker fue el favorito del QB, con 74 recepciones para 807 yardas y 3 touchdowns, pero el cuerpo de receptores no supondrá a priori demasiado peligro para la secundaria de los Chiefs: Rishard Matthews aportó 4 anotaciones en toda la temporada (795 yardas en 53 capturas), mientras que Eric Decker tan solo alcanzó la endzone una vez (563 yardas).
La baja de DeMarco Murray, esperanzados en Derrick Henry
Si a esto sumamos que los de Tennessee no podrán contar con la bestia de DeMarco Murray,
baja en el último partido del año y confirmado también que no disputará
este encuentro por su lesión debido a un desgarre de ligamento medial
colateral en su rodilla derecha. Murray ha sido el hombre más anotador de su equipo con 6 touchdowns, con 184 acarreos para 659 yardas (promedio de 3’6) y solo un balón perdido, la estrella ofensiva de los Titans.
Lo tendrá que suplir el joven Derrick Henry que
no acaba de romper en la NFL. En la última semana ante Jacksonville
cogió 28 veces el balón, pero tan solo pudo recorrer 51 yardas, lo que
maquilló con una recepción de TD de 66 yardas. Sin embargo, ha tenido
noches destacadas que le han llevado a superar a Murray, como las 131
yardas que sumó ante los Colts en la jornada 6, y ha terminado el año
con 744 yardas en 176 jugadas de carrera para él, con un promedio de 4’2
yardas por intento, y 5 anotaciones. No lo tendrá muy difícil, tendrá
delante a unos de los peores front-seven deteniendo la carrera
(puesto 25 al ceder 118’1 yardas en cada duelo, 4’3 yardas en cada
jugada), pero los Titans no superan los 25 puntos desde que el propio
Henry nos maravilló en la semana 6 (22-36 frente a Indianápolis).
Los Chiefs se las verán con una de las mejores defensivas
Sin duda será la defensa de Tennessee quien
tendrá que sacar las castañas del juego si quieren engancharse al
partido ante una de las ofensivas de lo más explosivas (el quinto ataque
más productivo del año con 375’4 yardas por encuentro).
Derrick Morgan, Brian Orakpo y Jurrell Casey destacan en el front-seven con 20’5 sacks entre
los tres, 43 en todo el año, la quinta mejor franquicia en este aspecto
empatados con los Chargers. Además, la línea defensiva de Kansas City
ha sido un coladero en los últimos encuentros, permitiendo diez capturas
en las cinco semanas finales.
En caso de ahogar a Alex Smith, éste
tratará de sacar balones vía terrestre con Hunt, quien ha mediado 4’9
yardas por acarreo, pero se topará con una de las mejores defensas contra la carrera:
los Titans son el cuarto equipo que menos avance han permitido en cada
intento, 3’6 yardas, y se enfrentarán al jugador que más yardas ha
recorrido en la temporada, todo un reto para la defensa de Dick LeBeau.
Sin embargo, los Chiefs tendrán un arma más que aún no se ha mencionado, el WR de segundo año Tyreke Hill. 1183 yardas en 75 recepciones con 7 touchdowns,
esos han sido sus números, pero lo que más sorprende de este jugador y
que ha salvado a muchos partidos de los Chiefs y a Alex Smith de los
rumores de su titularidad, han sido la cantidad de big-plays que
ha realizado: su media es de 15’8 yardas por captura, y ha recibido 15
balones que han movido las cadenas por más de 40 yardas.
El primer partido será un auténtico choque de trenes, unas de las mejores ofensivas del año con el mejor running back de
la temporada se enfrentarán a unos Titans que están donde están por su
defensa, especialmente por la defensa contra los corredores.