Los Cincinnati Bengals, franquicia que viene de elegir en los dos primeros picks de los últimos Drafts de la NFL, continúan en pie en estos sorprendentes Playoffs de la NFL. Doblegaron al mejor equipo de la conferencia AFC, los Tennessee Titans, por 19-16, en la primera victoria a domicilio en postemporada de la historia de los Bengals.
El joven Joe Burrow es el principal culpable de que la franquicia de Ohio haya podido llegar hasta donde está, la Final de la Conferencia AFC. Desde que perdieron la Super Bowl en 1989, nunca habían llegado tan lejos. El quarterback dio 348 yardas de pase en 28/37, liderando a su equipo pese a que no cuenta con la mejor línea ofensiva ni mucho menos, la cual permitió hasta 9 sacks, tres de Jeffery Simmons.
Burrow comandaba el ataque que, eso sí, no era capaz de finalizar en la endzone cuando se disponían en la zona roja. Y sumaron puntos solo a través de su kicker rookie Evan McPherson, a la postre héroe real del partido. Solo un touchdown de Derrick Henry, que estaba de vuelta, hizo frente por parte de los Titans que se iban al descanso perdiendo por 9-6.
El tercer cuarto lo abrieron los Bengals coronando un drive en touchdown de su corredor Joe Mixon. E interceptando por segunda ocasión a Ryan Tannehill (220 yardas, 15/24) por parte de Mike Hilton cuando estaban en primera y gol. Pero los Titans se recompusieron con un field goal de Randy Bullock, interceptando a Burrow gracias a Amani Hooker y concatenando esa acción con un touchdown aéreo e imposible de 33 yardas por parte de A.J. Brown. Los de Mike Vrabel empataban el encuentro a 16 puntos.
Ambas ofensivas se mantuvieron inoperantes en el último cuarto. Dentro de los dos minutos finales, los Titans tenían las de ganar cuando ya pisaban campo rival y dejaban el reloj en menos de 30 segundos para buscar un posible field goal para la victoria. Pero no fue así. Tercera intercepción a Tannehill, de Logan Wilson sobre la yarda 47 de Cincinnati.
Y la conexión habitual entre Burrow y Ja'Marr Chase hizo de las suyas una vez más. Pase profundo completado para ganar 19 yardas y entrar en field goal range. La patada era de hasta 52 yardas, pero el novato McPherson se mostró intratable y atinó su cuarto tiro de campo de este partido dándole el triunfo final a los Bengals.