
El combinado dirigido por Jaime Osborne culmina así una trayectoria prácticamente impecable en este torneo, en el que sólo han cedido ante Hungría en la primera fase, cobrándose como última víctima a una Rusia que se ha vuelto a confirmar como potencia de la especialidad y que plantó cara durante todo el partido a pesar del resultado.
Destacable fue la actuación de Ricardo Amérigo, que con sus paradas consiguió decantar el primer set para su selección. También la de Alberto Castro, especialista en ataques rápidos y autor del gol definitivo en el segundo set de la final.

En la final de consolación, la selección femenina española venció a Dinamarca para colgarse el bronce. Las pupilas de Dani Lara se suben a un podio por segundo año consecutivo tras ser campeonas del Mundo el año pasado en Budapest. El primer set fue claramente español (10-15), pero en el segundo las dansesas iban a forzar el shoot-out donde España supo mantener mejor los nervios. FUENTE