Fighting Cancer, el campeón del grupo America y supuestos "amateurs", derrotó a Godspeed, el campeón Pro, en la gran final por 26-6, para proclamarse en el campeón de la primera edición de la American Flag Football League (AFFL).
Esta competición ha dado a luz esta temporada impulsada por grandes ex-jugadores de la NFL como Michael Vick o Terrell Owens, dando un gran salto de profesionalidad a este deporte, a la modalidad deportiva sin contacto del fútbol americano.
Comparando con la modalidad jugada en Europa (IFAF) y el Flag mundial, que se juega con cinco jugadores y con el contacto mínimo, la AFFL se ha disputado en 7 vs. 7 y siendo algo más permisivos, pues aluden que el "contacto incidental" está permitido. Los partidos tienen una duración de 60 minutos, en un campo que se divide en 4 "cajas" de 25 yardas, las cuales tienen que ir avanzando para alcanzar los primeros downs (el campo del flag internacional son solo 2 "cajas").
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En cuanto a lo estrictamente deportivo, el Fighting Cancer equipo con sede en Nueva Orleans, fue dirigido por Darrell "Housh" Doucette, quien terminó con 242 yardas de pase, 88 yardas terrestres y dos pases de touchdown y fue nombrado el MVP. Desplegó un juego impecable con su squiva velocidad, su fuerte brazo y su gran defensa.
Housh se benefició a menudo de una estrategia de lanzamientos rápidos cortos y/o laterales, con jugadas rotas en las que él era el protagonista, o algunos pases profundos gracias a Darius Davis con quien intercambiaba el balón para romper el reloj de 4 segundos y poder buscar receptores con comodidad y/o salir a correr resultando imparable para la defensa rival.
El primer touchdown fue tras un pase lateral de Doucette al principal receptor del equipo, Charles Carmouche, que abrió el marcador y puso el 6-0 con el que se llegó al descanso. Nada más reanudar el encuentro, Doucette comandó un drive muy similar al de la primera anotación con 98 yardas avanzadas, y se puso el 13-0.
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Godspeed desperdició dos oportunidades dentro de la redzone en la primera parte, pues resultaba sumamente complicado alcanzar la endzone. Wallace (361 yardas en un 24/34, con un pase de touchdown y 1 INT) no pudo encontrar su objetivo favorito, el ex-receptor de los Eagles Jason Avant, y eso atascó demasiado a la ofensiva. El único touchdown lo lograron dentro ya de los últimos tres minutos del partido, cuando el marcador ya reflejaba un claro 26-0.