La carrera 900 en la historia de la categoría reina, y segunda consecutiva en el Red Bull Ring austriaco, volvió a estar plagada de emoción y dejó con la miel en los labios a los españoles Joan Mir y Espargaró, que soñaron con el triunfo.
Otra bandera roja partió la carrera en dos. El origen esta vez fue la Yamaha de Maverick Viñales, que logró salvar un incidente muy peligroso. Cuando rodaba a 220 kilómetros por hora, fallaron los frenos de su moto y tuvo que tirarse en marcha, por suerte sin consecuencias para su salud. Su Yamaha se estrelló contra las protecciones y se incendió al instante.
Hasta ese momento, el gran dominador había sido Joan Mir, que partía desde la tercera posición y enseguida capturó el liderato. El mallorquín inició una actuación soberbia y logró escaparse en solitario hasta alcanzar una renta superior a los dos segundos sobre sus rivales, cuando de repente empezó a ondear la bandera roja.
Tras el obligado paso por boxes, los neumáticos de su Suzuki ya no aguantaron en la segunda parte de la carrera, compuesta por 12 vueltas, y se tuvo que conformar con la cuarta posición final, viendo desde lejos la pelea por el triunfo entre Espargaró, Miller y el inesperado Oliveira.
Espargaró se puso al frente a falta de seis giros e intentó ensayar la escapada, pero sus perseguidores aguantaron hasta llegar a la fatídica última vuelta. El español y el australiano se regalaron sendos adelantamientos, pero en la curva final los dos se fueron largo, víctimas de sus propias ganas, y dejaron la puerta abierta para el atento Oliveira, que no lo desaprovechó.
En cuanto a la clasificación general, Fabio Quartararo se mantiene al frente pese a su 13ª posición. Después de cinco carreras disputadas en la categoría reina, el francés tiene 70 puntos y aventaja en tres a su perseguidor Andrea Dovizioso, 5º este domingo. FUENTE
