La vida sigue igual en los dos mejores equipos de la NCAA tras la Week 7, pero de ahí abajo continúa habiendo cambios como cada semana. Después de que Florida escalara al top-5 del ránking AP y se cayera una semana después, a North Carolina le ha ocurrido lo mismo. Por su parte, se agenció Notre Dame de la tercera posición relegando a Georgia al 4º, tras su derrota contra Alabama en el partido de la semana.
Ohio State (5º) subió de nuevo sin jugar, pero ya en la próxima jornada toda la Big Ten se estrenan en competición, y veremos seguramente muchos cambios en el AP Top-25. Oklahoma State es 7ª y Texas A&M subió cuatro posiciones saltando al 8º lugar, por delante de otro equipo Big Ten que debutará este fin de semana como Penn State. Mientras tanto, Clemson y Alabama no ven peligrar sus dos primeros puestos.
Por otro lado, tres nuevos equipos aparecieron en el ránking: Marshall (22º), NC State (23º) y Coastal Carolina (25º). Es la primera vez que los Chanticleers, desde 2017 que juegan en la FBS, son rankeados. Tienen un récord de 4-0 en la actual temporada, cuando en las tres anteriores apenas sumaron 13 victorias entre todas ellas. Ganaron en la Week 7 por 30-27 a los Louisiana Rajin' Cajuns.
Clemson y Alabama siguen afianzados como los dos primeros
El número 1 se mantiene para los Tigers, tras dar una tremenda paliza sin piedad a Georgia Tech por 73-7. Hasta diez jugadores tuvieron intentos de carrera, y Trevor Lawrence dio 4 pases de touchdown con 404 yardas (24/33). Claramente pudo descansar en el encuentro y tuvieron drives tres quarterbacks más de Clemson. El receptor Amari Rodgers tuvo dos anotaciones y 161 yardas de recepción.
El partido que todos teníamos ganas de ver de esta Week 7 era el que enfrentaba a Alabama y Georgia. Cualquiera podía ganar, pero los Crimson Tide se recuperaron en la segunda parte y con un parcial de 21-0 se llevaron el gato al agua con un marcador final de 24-41.
Alabama tuvo un horrible comienzo, siendo Mac Jones (417 yardas en 24/32 pases) muy presionado e incluso interceptado por Richard LeCounte. Pero respondieron con otro turnover, gracias a que su línea defensiva bloqueó el lanzamiento de Stetson Bennett (269 yardas pero menos del 50% de completados) y Justin Eboigbe interceptó. Después, un touchdown larguísimo de 40 yardas de John Metchie abrió el marcador.
Tras un intercambio defensivo de los dos equipos, el juego de carrera de los Bulldogs empezó a carburar con Kendall Milton y Zamir White, quien empató el primer cuarto. Al iniciarse el segundo, una tremenda big play para James Cook adelantaba a Georgia. No obstante, el partido estaba siendo muy igualado, y una gran jugada de 38 yardas de Jaylen Waddle puso en bandeja la anotación de Devonta Smith que empataba a 17 puntos. Antes del descanso, le dio tiempo a los Bulldogs de golpear de nuevo a través del segundo pase de touchdown de Bennett, para Jermaine Burton. Y a Alabama de restar tres puntos a la diferencia (24-20).
En la segunda parte el ataque de Georgia desconectó por completo, mientras que el de los Crimson Tide tardó pero comenzó a despuntar con un touchdown de Waddle. El receptor dejó a su asignación por los suelos, literalmente, y corrió hasta 90 yardas para llegar a la endzone y poner a Alabama 24-27 arriba. En el siguiente drive, Malachi Moore interceptó, y no fallaron en su siguiente ofensiva. Najee Harris, quien tuvo 152 yardas en 31 acarreos, anotó y se pusieron 24-34.
Nada más empezar el último cuarto, la presión a Bennett potenció su tercera intercepción del partido, esta de Daniel Wright. Y las opciones de Georgia se fueron esfumando cuando Devonta Smith volvió a anotar en el posterior drive al turnover. Para colmo, los Bulldogs fallaron un field goal, y el running back Harris se encargó de matar el partido con sus jugadas terrestres.
Notre Dame sube, North Carolina se desconecta del Playoff
De la lucha por las otras dos plazas de Playoffs, se cayó North Carolina, de quien hablaremos justo después, y salió fortalecida la universidad de Notre Dame. En la Week 7 sumaron un agónico triunfo ante Louisville, donde las defensas vendieron muy caro las anotaciones. Los Fighting Irish sobrevivieron en la primera mitad con dos field goals, pero vivir solo del grupo defensivo no resultaba suficiente. A mediados del tercer cuarto, los Cardinals se adelantaron (7-6) con touchdown de Malik Cunningham hacia Marshon Ford.
Pero verdaderamente la defensa de Notre Dame era un horror para Louisville, quien se quedó en 219 yardas totales avanzadas. Finalmente, una anotación del quarterback Ian Book, también en el tercer cuarto, colocaba el definitivo 12-7. Las carreras de Kyren Williams (127 yardas, con una media de 5 yardas por jugada) cerraron el partido en favor de los Fighting Irish.
Como contrapartida, los Tar Heels descendieron al 14º puesto tras perder ante Florida State por 28-31, equipo no rankeado. Tuvieron una pésima primera mitad que acabarían pagando con la derrota en esta Week 7. Las trincheras de los Seminoles anulaba a North Carolina mientras que la secundaria de los Tar Heels hacia aguas ante el ataque comandado por Jordan Travis (8/19 para 191 yardas). Consiguieron 4 sacks, impedían conversiones de terceros downs y se exhibían con big plays y juego terrestre, teniendo al RB La'Damian Webb con 109 yardas y al QB Travis también superando el centenar (107).
Florida State salió al duelo bloqueando un punt, anotando su quarterback un par de veces, cruzándose el campo con dos jugadas de más de 55 yardas cada una para anotar un field goal y realizando un pick six. El defensive end Joshua Kaindoh se adelantó en una screen pass que intentaba Howell y puso el marcador en 24-0. Ya a finales del segundo cuarto, Javonte Williams abrió el marcador de los Tar Heels, pero su defensa concedió un touchdown más antes del descanso, de Camren McDonald (31-7).
North Carolina intentó remontar lo imposible en la segunda mitad. Howell terminaría con un buen partido (374 yardas en 20/36 completos y 3 pases de touchdown) y tiró del carro hasta quedarse a la orilla de forzar, al menos, la prórroga. El tercer cuarto fue una exhibición aérea de Howell, con Williams (119 yardas terrestres y 67 por aire) y Beau Corrales (141 yardas de recepción) anotando cada uno y acercando al 21-31. Además, antes de dar paso al último cuarto, intercepción de Trey Morrison.
Después de que ambos equipos fallaran un tiro de campo, North Carolina se ponía a tiro a menos de cinco minutos del final. Con un drive de 9 jugadas y 80 yardas avanzadas, Howell conectó con Dyami Brown. Finalmente, la defensa de los Tar Heels dio una última oportunidad a su ataque. Howell comandó a los suyos hasta el campo contrario, pero dos drops consecutivos estando solos Williams y Dazz Newsome, condenaron la primera derrota de North Carolina al no convertir un cuarto down a 9 yardas para aproximarse y garantizar el field goal del empate.
Texas A&M y Miami en ascenso tras la Week 7
Los que entraron con fuerza en el Top-10 fueron los Aggies que aprovecharon la inestabilidad de Mississippi State para ponerse 3-1. Los Bulldogs acabaron con un horrible -2 yardas de carrera y 219 yardas de pase entre los dos quarterbacks que jugaron, K.J. Costello (99 yardas en 15/22) y Will Rogers (120 en 15/18).
No se abrió el marcador hasta el segundo cuarto con una carrera de 3 yardas a la endzone de Isaiah Spiller. El running back fue el arma más importante de Texas A&M en el encuentro, pues terminó con 114 yardas. Después, los Aggies bloquearon un punt dejando el balón en la yarda uno y de nuevo empujó Spiller para el 14-0. El quarterback Kellen Mond (13/23, 139 yardas) aún no había aparecido como quien dice, mientras que a Costello lo habían bombardeado con 4 sacks en la primera mitad, y con una intercepción de Myles Jones.
Un fortuito pick six de Emmanuel Forbes, pues le cayó el balón tras deflectarlo un compañero, animó a los Bulldogs. Pero los Aggies no tardaron en responder, a través de un touchdown de más de 50 yardas de Chase Lane con un tremendo sprint inalcanzable (21-7). Posteriormente, Buddy Johnson provocó un fumble a Costello en las diez primeras yardas de su campo, y Mond dio un pase de touchdown para Ainias Smith. Eso hizo que Mike Leach lo sentara y sacase a Rogers al campo a mediados del tercer cuarto.
Ya en el último periodo, Malik Heath realizó la única anotación ofensiva de Mississippi State. Completó un touchdown de 32 yardas evitando varios tackles por la línea de banda, para establecer el 28-14 final. Los Aggies tuvieron la capacidad de gestionar el reloj y agotarlo durante los últimos cinco minutos.
Otro partido muy interesante de la Week 7 enfrentaba a Pittsburgh y Miami, quien subió dos posiciones en el Top-25 (11º). La defensa de los Hurricanes hizo frente a la habitual de los Panthers, dejándolos en solo un total de 22 yardas terrestres y provocando dos fumbles. Al quarterback D'Eriq King le costó arrancar pero acabó con 222 yardas de pase y 4 pases anotadores, sumando además 32 yardas de carrera. Miami sostuvo el ritmo en todo momento y vencieron por 19-31.
La defensa de Pittsburgh causó serios estragos a King y los suyos en la primera parte. Lograron estrenar el marcador con una jugada aérea de 35 yardas del RB Cam'Ron Harris. Mientras, los Panthers estaban consiguiendo más yardas por penalizaciones que por juego. Y es que la defensa de Miami también estaba sacando su garra, permitiendo solo 2'9 yardas por jugada en la primera mitad. Una intercepción de Paris Ford hasta la redzone acercó algo a los Panthers antes del descanso (14-6), tras recibir una anotación del TE Will Mallory.
Nada más abrir el tercer cuarto, touchdown de 38 yardas de Mike Harley para los Hurricanes. Por su parte, los Panthers solo sabían sumar por field goals, eran incapaces de convertir nada hasta la endzone. Marquis Williams interceptó poniendo el balón en primera y gol. Y esta vez sí, con un bonito play action Joey Yellen conectó con Daniel Moraga y metía de lleno a Pittsburgh en el partido (16-21). No obstante, hubo respuesta de Miami antes del último cuarto, de nuevo a través de Mallory con una anotación de 45 yardas.
Con un 19-28 para los Hurricanes afrontaban el cuarto periodo. Después de varios despejes, los de Florida gestionaron el tiempo con un drive que les regaló tres puntos más consumiendo unos seis minutos y dejando el reloj a 4:31. Con 4 pases incompletos de Yellen murió el partido devolviendo la posesión a Miami.
Duelo de Cougars en favor de BYU
BYU sigue ganando créditos para codearse entre los mejores equipos. La universidad independiente de Brigham Young consiguió su quinto triunfo y permanecen invictos, para subir del 14º al 12º puesto, por detrás de Cincinnati (3-0), Florida (2-1) y Miami (4-1). Los Cougars son, junto a Clemson, SMU y Liberty, las únicas universidades que marchan con un impoluto 5-0.
En la Week 7 vencieron por 43-26 a otros Cougars como son los de Houston. El QB Zach Wilson corría (40 yardas) y pasaba (400 yardas con un 71'4% de acierto y 4 pases de TD), y BYU empezó mucho más fuerte. En el primer cuarto anotaron un salvaje Dax Milne (184 yardas en 9 recepciones) y Lopini Katoa. Pero tres anotaciones seguidas de Houston en el segundo cuarto, con una defensa incluida en cuarto down a una yarda de la línea de gol, dieron la vuelta al marcador (14-20). Clayton Tune conectó con Christian Trahan y Nathaniel Dell.
En el tercer cuarto hubo un intercambio defensivo hasta que Tune sumó un touchdown terrestre. Y se la jugó de dos pero fue interceptado en ese extra. A partir de entonces, BYU no miró más atrás. El receptor Milne se exhibió yéndose a las tres anotaciones, y también consiguieron aterrizar en la endzone Masen Wake y Tyler Allgeier.
Auburn y Tennessee desaparecen. SMU imbatido
Auburn perdió su segundo partido de la temporada y desapareció del Top-25. Cedieron ante South Carolina, y eso que salieron mejor, con un touchdown de Eli Stove. Pero al abrir el segundo periodo, los Tigers fueron interceptados por Jaycee Horn (9-7). En este cuarto, Bo Nix recibiría otra, y el QB Collin Hill pondría el 16-14. A finales del tercer cuarto llegó la tercera intercepción, la segunda de Horn, y los Gamecocks consiguieron distanciarse 19-27 con anotaciones de Shi Smith y Kevin Harris. Dos field goals después (22-30), la última posesión recayó en Auburn. Pero la jugada final fue una carrera en cuarto down de Nix que no llegó nada.
Al igual que los Tigers de Alabama, Tennessee se cayó del ránking al ser derrotado claramente por Kentucky (34-7). Los Volunteers dominaron el primer cuarto con su ofensiva todo el rato sobre el campo, pero no consiguieron ningún punto. En el segundo, recibieron tres intercepciones prácticamente de seguido, dos de ellas a Jarrett Guarantano terminadas en pick six, y 17-0 para los Wildcats. El juego terrestre de Kentucky totalizó 187 yardas, con Christopher Rodriguez Jr. y Terry Wilson de líderes en yardas de carrera.
Cerramos esta Week 7 con un partido de alto voltaje, con muchas grandes jugadas de ambos equipos pero sobretodo de SMU. Los Mustangs subieron al 16º puesto del AP Top-25 al ganar 37-34 a Tulane. Alcanzaron el descanso con un 17-17, con un toma y daca de puntos en el que ningún equipo se marchaba en el marcador. Esa tónica se mantuvo y llegaron empatados a 34 puntos a minuto y medio del final, donde la Southern Methodist University tendría un último drive. Una big play de Tyler Page en tercer down puso a SMU en field goal range, pero fallaron el tiro de campo ganador.
Los Waves mantuvieron el pulso con juego terrestre principalmente, donde Stephon Huderson consiguió 132 yardas y 1 touchdown, y el QB Michael Pratt completó dos anotaciones por tierra y un lanzamiento de TD a Mykel Jones. Por su parte, los Mustangs galoparon bajo la buena dirección de Shane Buechele (23/37, 384 yardas), quien tuvo a tres receptores por encima de las cien yardas: Rashee Rice (139), Danny Gray (133) y Page (101). En la prórroga, la primera serie ofensiva de Tulane fue interceptada por Brandon Crossley. Y SMU en su ataque esta vez sí atinó el field goal de la victoria.
