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| Foto: Vincent Jannink/EPA |
Como ya ocurriera en los Juegos Olímpicos de 2018, la competición de curling se pondrá en marcha con la disputa de la modalidad de dobles mixtos, que tan exitosa resultó ser en su primera aparición en el calendario olímpico hace cuatro años. Este miércoles, 2 de febrero, a las 13:05 (hora española) arranca una competición, que si bien es especial para cualquier atleta que tiene la oportunidad de formar parte de ella, será aún más especial para Tahli Gill y Dean Hewitt. Sin importar el resultado que logren en la competición estos dos atletas australianos ya habrán hecho historia en el momento en el que pongan un pie en el hielo para jugar su primer partido ante Estados Unidos. Gill y Hewitt forman el primer equipo del país oceánico que se ha clasificado para un torneo olímpico de curling en cualquier modalidad desde que este figura en el programa como un deporte oficial.
La pareja australiana consiguió su billete para Beijing 2022 a través del torneo preolímpico que se celebró en Países Bajos el pasado mes de diciembre. Tras clasificarse para una de las finales del torneo, vencieron a Corea en el partido decisivo por un ajustado 6-5 en un duelo que sin duda forma ya parte de los grandes momentos de la historia del curling. Australia, un país con una gran tradición olímpica pero sin tradición alguna en los deportes de hielo, hacía su entrada triunfal en la élite, un hito que tanto Gill como Hewitt esperan que inspire e impulse el crecimiento del curling en su país, que actualmente ni siquiera cuenta con una instalación propia para este deporte por lo que los jugadores de curling deben entrenar en instalaciones de hockey hielo, patinaje artístico o patinaje de velocidad.
En 2019, en su primera gran competición como equipo, Gill y Hewitt lograron una meritoria cuarta plaza en el campeonato del mundo. Gracias a esa buena actuación recibieron un pequeño apoyo financiero por parte del Instituto de Deportes de Invierno de Australia, pero mientras que algunos de los rivales a los que se enfrentarán durante la competición olímpica se dedican al curling de forma profesional, el equipo australiano es completamente amateur. De hecho su hazaña ha sido comparada con la del equipo jamaicano de bobsleigh que participó en los JJOO de 1988 y que posteriormente inspiró la película "Elegidos para el triunfo".
Para un país con la enorme tradición olímpica, participar en la competición de curling por primera vez supone un gran orgullo. Tanto Gill como Hewitt saben que este miércoles, cuando se enfrenten a Estados Unidos en su debut en la competición, estarán haciendo historia pero esperan que una vez comience el partido sean capaces de mantener la calma, al mismo tiempo que sueñan con un futuro mejor para el curling australiano.
