Judd Trump se proclamó anoche campeón del UK Championship 2011 tras derrotar en la final a Mark Allen por 10-8. Fue una final vibrante y con buen snooker de ataque, como cabía esperar. Allen comenzó 1-3 arriba, pero entonces Trump encadenó 7 frames consecutivos a un nivel escandaloso. Lejos de bajar los brazos, el de Antrim consiguió tres centenas en cuatro frames, demostrando que aún estaba vivo. Llegó a colocarse 9-8, con la esperanza de culminar una remontada épica, pero Trump mantuvo la sangre fría y cerró la final con un bonito 91.
En los últimos ocho meses, el inglés ha llegado a tres finales de ránking y se ha llevado dos títulos, y se ha convertido en el nuevo paladín del juego ofensivo sobre todo ahora que O’Sullivan comienza a estar de capa caída. Esperemos que no se deje llevar por los excesos y que su familia le ayude a mantener los pies en el suelo. Normalmente, este chico no deja a la gente indiferente; tiene muchos fans y también detractores. Yo creo que su estilo de juego es entretenido y que goza de una confianza brutal, un aspecto clave en el snooker.
En definitiva, ha sido un torneo espectacular. Es cierto que el torneo ha perdido parte de su esencia al recortar el número de frames, pero la eliminación de la cortina entre mesas y la posibilidad de poder ver todos los partidos íntegros creo que lo ha compensado con creces.