
El Barça Intersport certificó el cambio de poder en el balonmano español tras ganar la Supercopa al Atlético (31-34) en Vistalegre. Rutenka, mejor jugador del partido, simbolizó la superioridad azulgrana ante un rival debilitado por sus ajustes económicos que se encuentra en plena fase de construcción. Saric, portero del Barça, también estuvo muy inspirado en acciones claves de la final el día que Sterbik regresó a Madrid.
El portero serbio, último fichaje barcelonista de la temporada, no jugó y durante todo el partido fue insultado por su antigua afición. Al final, muy comedido, Sterbik apenas celebró la victoria azulgrana.
Ganó el Barça por su buena lectura del partido, aunque le faltó intensidad defensiva al equipo de Xavi Pascual en la segunda parte. Con un Dani Sarmiento inicialmente muy acertado en la dirección y un Rutenka explosivo, el equipo azulgrana dominó a un Atlético con mucho carácter pero menos recursos. FUENTE