El alemán John Degenkolb se impuso en la París-Roubaix, la "reina de las clásicas", y firmó la segunda victoria alemana de la historia, 119 años después del triunfo de Josef Fischer, que ganó la edición inaugural
Vencedor de la Milán-San Remo el mes pasado, Degenkolb culminó una carrera espléndida para imponerse en un inesperado esprínt de siete corredores, algo inédito desde el comienzo de este siglo, tras los 253,5 kilómetros de esta 113ª edición.
El alemán del equipo Giant, de 26 años, llegó al velódromo de Roubaix con un grupo de seis corredores. El checo Zdenek Stybar quedó segundo por delante del belga Greg Van Avermaet y del holandés Lars Boom.
Wiggins se retiró de la ruta
El favorito, el noruego Alexander Kristoff, se clasificó décimo, dentro de un grupo que llegó con un retraso de treinta segundos.
La escapada del día fue neutralizada a veinte kilómetros del final. A pesar de los muchos intentos, la carrera no se decidió en el terreno adoquinado, y en los instantes finales Degenkolb maniobró con maestría.
En tanto, el británico Bradley Wiggins, en su última aparición en una carrera en ruta, se ha mostrado en varias ocasiones, pero el vencedor del Tour de Francia 2012 finalmente no pudo seguir a los primeros y finalizó lejos del triunfo.
Wiggins, que ahora se centrará en la pista con los Juegos Olímpicos de Rio 2016 como gran objetivo, finalizó con el primer pelotón perseguidor (18º).
Foto: AFP