Las malas noticias siguen
llegando a Cleveland. El codazo de Harrison Barnes sobre Kevin Love
durante el segundo partido de estas Finales de la NBA ha dejado fuera de
combate al ala-pívot estrella del Big-Three de los Cavaliers.
Sufrió una conmoción cerebral, y por ello es duda para el tercer duelo con los Warriors, y puede llegar a perderse lo que resta de serie, pues el protocolo de la liga sobre conmociones cerebrales obliga a abandonar las listas del equipo hasta que no presente ningún síntoma más. La experiencia en estos casos nos refleja un periodo largo de inactividad del jugador, pudiendo ser un día o hasta varias semanas, lo que le dejaría sin duda fuera del resto de las Finales NBA.
Kevin
Love tuvo que marcharse a vestuarios en el segundo encuentro debido a
los síntomas mostrados tras recibir el golpe. Los médicos lo retiraron
en cuanto vieron que el jugador miraba muy perdido y se encontraba
mareado.
Solo
tenemos las palabras de Tyronn Lue que nos dejan la cuestión de si
podrá regresar Love o volverá a dejar solos a los Cavs en las Finales
(el año pasado se lesionó el hombro izquierdo y estuvo de baja varios
meses):
"Se siente mejor pero ahora mismo se encuentra en el protocolo de conmoción (de la NBA) y será evaluado diariamente. Perder a uno de nuestros tres jugadores más importantes siempre va a tener un gran impacto".
Nuevo papelón que se le presenta a LeBron James. Con un 2-0 en contra en la serie, ahora no podrá contar con uno de sus grandes compañeros en los Cavaliers, y la remontada se les complicará aún más.