Primera victoria de Kirk Cousins en un Monday Night Football tras nueve derrotas consecutivas en los partidos del lunes. Los Minnesota Vikings cortocircuitaron a la ofensiva de Chicago Bears y vencieron por 19-13, dejándoles con un único touchdown que llegaría sin embargo por equipos especiales. Esto supone el tercer triunfo seguido de la temporada para el equipo de Mike Zimmer. Y la cuarta caída consecutiva de los de Illinois a quienes se les van esfumando sus posibilidades de Playoffs (5-5) tras este duelo en la NFC Norte.
Chicago apenas ganó 149 yardas ofensivas, mientras que los Vikings tuvieron un buen desempeño bajo el mando de Cousins. El quarterback repartió 292 yardas en 25 pases completados y once incompletos, con dos pases de touchdown. Dalvin Cook fue muy bien contenido por la buena defensa de los Bears, la que dio esperanzas de victoria a su equipo en este encuentro. Pero su insistencia le hizo terminar con 96 yardas terrestres, en hasta 30 acarreos. Además, los de Matt Nagy solo visitaron la zona roja una vez, y solo convirtieron dos terceros downs en todo el encuentro de 11 ocasiones.
Ambos ataques comenzaron algo despistados, con Kyle Rudolph perdiendo un balón por culpa de Danny Trevathan ya en las inmediaciones del campo rival. Y después, Harrison Smith interceptó a Nick Foles (106 yardas, 15/26), tras un dropeo de Anthony Miller. Ese turnover serviría para que Cousins conectara con Adam Thielen en la endzone en un envío de 17 yardas. El receptor recibió a una mano el balón y en cobertura.
Pero los Bears también anotarían en el primer cuarto. Con una magnífica recepción de Allen Robinson de 24 yardas se metieron en redzone, aunque tuvieron que conformarse con tres puntos de Cairo Santos. No obstante, la ofensiva de los Vikings estaba rodando bien con Cousins completando prácticamente todo. Pero de nuevo la defensa de los Bears actuó con una intercepción cuando Minnesota ya había rebasado el medio campo, esta de Khalil Mack. La jugada sirvió para un field goal antes de ir al descanso (7-6).
Chicago sin puntos en la segunda parte desde su ataque
Los Bears no pudieron abrir mejor la segunda parte con el bueno de Cordarrelle Patterson retornándose todo el campo en el kickoff. Por nada más ni nada menos que corriendo 104 yardas para ponerse por delante, 7-13. Como contrapartida, tras obligar a despejar a los Vikings, un fumble del retornador Dwayne Harris dejó el balón en redzone, para que Minnesota sumase un field goal de 37 yardas.
En este tercer cuarto ambas defensas estaban sacando sus garras. Una enorme recepción del rookie Justin Jefferson de 54 yardas desahogó a Minnesota que se había encapsulado en un 3&11 tras una falta por holding. Y sirvió para empatar el partido con un nuevo tiro de campo de Dan Bailey.
Ya en último periodo, Dalvin Cook había sido de momento muy bien controlado por la defensa de los de Matt Nagy. Pero el running back tuvo más papel en un drive donde realizó 27 yardas en cuatro carreras. La serie fue culminada de nuevo por Thielen recibiendo en la endzone, quedándose el marcador en 19-13 por un mal snap a la hora de intentar el extra point.
Un buen retorno de Anthony Miller tras dos despejes metió a Chicago en el campo de Vikings, algo que sin duda necesitaba la ofensiva de Foles que no terminaba de ser una amenaza. Se jugaron un 4&9 cerca de llegar al two minute warning, pero el balón no llegó a las manos de Miller en un pase que podría haber acabado en un bonito touchdown aéreo.
Regresó el ataque de los Vikings que con una captura de Rudolph de 21 yardas que puso el ovoide en la 40 de Chicago, y el reloj se iba consumiendo. Aún así, los detuvieron y salieron los Bears desde la yarda 20 con 44 segundos por jugarse y sin tiempos muertos. En la primera jugada, Minnesota colapsó el pocket, con Ifeadi Odenigbo dando alcance a Foles que se tuvo que retirar lesionado de la cadera o de la pierna. Saldría Tyler Bray, el tercer quarterback del roster de los Bears, quien tuvo un completo con Ryan Nall de 18 yardas. Pero recibió una nueva presión salvaje del front-seven de los Vikings, y después lanzó dos pases incompletos que hicieron rendir el encuentro.