El Herbalife Gran Canaria sigue peleón en A Coruña y tras vencer al líder liguero, el Valencia, en cuartos de final, ha ganado por 81-71 al Dominion Bilbao Basket en semifinales de la Copa del Rey, y jugará así su primera final copera de la historia.
Albert Oliver (18 puntos, 4 asistencias), Salin (12 puntos), y Eulis Báez (10 puntos, 8 rebotes) fueron los líderes de anotación del equipo de Aíto García Reneses. Clevin Hannah estuvo espectacular con 20 puntos junto al eterno Alex Mumbrú (17 puntos), protagonista de la eliminación del Barcelona en cuartos de final.
El acierto en la larga distancia del Bilbao Basket causaba estragos en la defensa canaria. Durante la primera parte estuvo siempre en torno a un porcentaje del 50% de aciertos desde más allá de la línea de tres puntos, primero enganchado al acierto de Hannah, luego al de Bertins. Le bastó para encarrilar más o menos el encuentro y manejarse largo tiempo 10 o más arriba en el marcador. De esta forma, los hombres de Sito Alonso llegaron al descanso con un cómodo 46-34.
Sin embargo, Bilbao volvió a dañar al Gran Canaria en el inicio del tercer cuarto para llegar a un 51-34. Con el partido en bandeja, los vascos vieron como los canarios reaccionaban y se metían en el partido. Sólo cedieron 9 puntos en el tercer cuarto, y en los últimos 10 minutos se vio un auténtico vendaval amarillo y a 5 minutos del final empataron con un triple de Salin y poco después se pusieron por delante (62-64) tras un parcial de 11-30.
Albert Oliver (18 puntos, 4 asistencias), Salin (12 puntos), y Eulis Báez (10 puntos, 8 rebotes) fueron los líderes de anotación del equipo de Aíto García Reneses. Clevin Hannah estuvo espectacular con 20 puntos junto al eterno Alex Mumbrú (17 puntos), protagonista de la eliminación del Barcelona en cuartos de final.
El acierto en la larga distancia del Bilbao Basket causaba estragos en la defensa canaria. Durante la primera parte estuvo siempre en torno a un porcentaje del 50% de aciertos desde más allá de la línea de tres puntos, primero enganchado al acierto de Hannah, luego al de Bertins. Le bastó para encarrilar más o menos el encuentro y manejarse largo tiempo 10 o más arriba en el marcador. De esta forma, los hombres de Sito Alonso llegaron al descanso con un cómodo 46-34.
Sin embargo, Bilbao volvió a dañar al Gran Canaria en el inicio del tercer cuarto para llegar a un 51-34. Con el partido en bandeja, los vascos vieron como los canarios reaccionaban y se metían en el partido. Sólo cedieron 9 puntos en el tercer cuarto, y en los últimos 10 minutos se vio un auténtico vendaval amarillo y a 5 minutos del final empataron con un triple de Salin y poco después se pusieron por delante (62-64) tras un parcial de 11-30.
Para entonces Bilbao tenía varios problemas. El acierto desde los 6,75 metros se había rebajado a la mitad. Trabajaba el rebote con cierta prestancia, pero tenía manos blandas en el manejo, demasiadas pérdidas. Su banquillo aportó en la suma final apenas siete puntos. Y otra vez el valor de la mente. Bilbao se frenó y Gran Canaria se disparó justo cuando el partido se decidía. Será la duodécima final de Copa de Aíto. FUENTE