Lo tuvo más cerca que nunca, pero Álvaro Valera tendrá que esperar para lograr su segundo oro en unos Juegos Paralímpicos. Se le escapó la medalla dorada al mejor jugador del mundo de tenis de mesa en clase 6 (reservada para los palistas con mayor discapacidad que compiten de pie). Solo Peter Rosenmeier le impidió subir a lo más alto del podio en Río de Janeiro, aunque suma una valiosa medalla de plata.
Esta vez el danés no claudicó ante el poderío del español, que pese a tener bien controlado el partido, se vio sorprendido por un jugador al que había vencido en las finales del Mundial 2014 y Europeo 2015. Fue un duelo muy táctico entre dos palistas que se conocen bastante y se decidió por pequeños detalles (2-3: 11-5, 11-13, 11-6, 9-11, 6-11).
El andaluz se llevó el primer set por un claro 11-5 con templanza, insistiendo con su saque al medio de la mesa y después buscando las esquinas para hacer daño. Rosenmeier apostó por bolas cortas cerca de la red para tomar ventaja en el inicio de la segunda manga (1-4), y, después de un intercambio de golpes, el nórdico se apuntó el set en el desempate (11-13).
En el tercero, Valera empezó fuerte, tiró de inteligencia y habilidad para ponerse 7-2. Pese a que el jugador danés acortaba distancias, el español con varios puntos directos de saque, por los que protestaba continuamente su adversario, cerraba el set con solvencia (11-6). Cuando todo parecía estar del lado del español, la juez llamó la atención a Valera por sus saques, que se descentró y la balanza se inclinó para el danés. En la cuarta manga Valera llegó a salvar dos bolas de set pero no pudo con la tercera (9-11).
Todo se decidiría en el último set, que arrancó con ventaja para Rosenmeier (1-5), muy crecido jaleado por la hinchada. El español respondió y se acercó en el marcador, pero el danés estaba muy enchufado y no iba a dejar escapar la oportunidad de vencer a su bestia negra en los últimos años. Al final, rostro de cierta decepción en Valera porque después de 16 años tenía muy cerca repetir el oro de Sidney 2000.
Por otro lado, Juan Bautista Pérez no ha podido conseguir la décima presea de estos Juegos Paralímpicos y se tuvo que conformar con un meritorio diploma paralímpico. El palista perdió en el partido por el tercer y cuarto puesto contra el italiano Anime Kalem Mohamed por un resultado muy abultado (3-0). El jugador transalpino no ha dado opciones al español y le ha endosado un 11-7, 11-8 y 11-6 para rematar la faena y subirse al tercer cajón del podio.
El jugador que reside en Almendralejo lleva desde los 18 años jugando al tenis de mesa y con 49 años ha estado a un partido de colgarse su primera presea paralímpica en su primera experiencia paralímpica. Entre sus logros destaca el Campeonato de España y el bronce en el Mundial de Pekín 2014.
Mientras Juan Bautista se jugaba el bronce, en el mismo Carioca Arena 3 se estaba disputando la final por el oro que ha caído del lado de un jovencísimo palista belga. Con tan sólo 16 años Laurens Devos ha ganado al experimentado Gerben Last para colgarse un histórico oro paralímpico en clase 9.