
Los sudamericanos salieron al campo con mucha fuerza, y acorraló a su rival. El dominio era de la Roja, el balón también, y pronto empezaron a llegar las ocasiones. La primera fue para Vidal, que remató dentro del área una cesión de Aranguiz pero que se estrelló ante la defensa alemana. Las recuperaciones en el campo germano de los chilenos fueron constante, pero fue un error de Marcelo Díaz el que decidió el partido. Intentó sacar el balón jugado siendo el último hombre, no se percató de la presencia de Timo Werner, y el delantero del Leipzig robó el balón y se lo cedió a Stindl, que no tuvo más que empujar el cuero a puerta vacía.

Tras el descanso, el encuentro se volvió tosco, tenso, y los enfrentamientos entre jugadores de ambas selecciones se sucedieron. El paso de los minutos favoreció a Alemania, que se defendió con orden ante la impotencia chilena. Lo intentó Chile hasta el final, y Sagal la tuvo a bocajarro y disparó alto. En el último minuto, Alexis casi marca de falta, pero Ter Stegen salvó a Alemania. FUENTE