Sin embargo, tras dos primeros cuartos igualados, el equipo de Salamanca dio un tirón serio en el tercer cuarto y empezó a coger ventajas importantes, superiores ya a los diez puntos. Aún así, el Girona no daba su brazo a torcer y a medida que avanzaba el cuarto empezaba a reducir distancias situándose a menos de siete puntos antes de finalizar el cuarto.
En el último periodo, el conjunto catalán seguía apretando y llegaba a situarse a dos puntos (56-54) a 7:29 del final con una canasta de Santos. Sin embargo, el equipo charro no podía defraudar a un Würzburg hasta la bandera y con una Erika espectacular que acababa con 17 puntos y 11 rebotes y MVP empezaba a dar un nuevo estirón que, a la postre, resultaría definitivo hasta establecer el 72-62 final que supone la octava Supercopa para las salmantinas. FUENTE
