Con agonía pero al fin y al cabo los Chicago Bears logran ponerse 2-0 en el inicio de esta nueva temporada de la NFL. Hicieron sucumbir a los New York Giants por 17-13, pero tuvieron una muy mala segunda parte en la que los neoyorkinos estuvieron bien cerca de completar la remontada.
El partido comenzó como terminaron los Bears su primer duelo del año ante Detroit Lions, con una pequeña corazonada con Mitchell Trubisky (18/28 para 190 yardas de pase). El quarterback que genera tantas controversias estuvo espléndido durante la primera parte, apenas ejecutando malas decisiones y comandando a su equipo. Tanto es así que los de Matt Nagy se fueron al descanso venciendo por 17-0 con total superioridad.
Además de los dos pases de touchdown que dio Trubisky, hacia David Montgomery y hacia el rookie Darnell Mooney, añadiendo un field goal de Cairo Santos, la defensa de los Bears dominó a los Giants en esta primera parte. Los puntos del kicker fueron facilitados por un fumble que recuperó Khalil Mack, Deon Bush también obró una intercepción y el front-seven alcanzó a Daniel Jones (25/40 para 291 yardas) en cuatro ocasiones. Para colmo, los Giants perdieron a Saquon Barkley por lesión en la rodilla, que de confirmarse podría ser una ACL y adiós a la temporada del running back estrella.
Sin embargo, Chicago dejó de ser tan dominante en la segunda parte. Trubisky apenas completaría cinco lanzamientos para 31 yardas y la buena racha de convertir terceros downs se detuvo (convirtieron en total el 56%). Si a eso le sumas que el sophomore Daniel Jones empezó a soltarse y a conectar con sus receptores, especialmente con Golden Tate y el tight end Evan Engram (65 yardas), los malas noticias no tardarían en llegar al aficionado de los Bears.
Daniel Jones aparece a partir del tercer cuarto
Intercepción de Julian Love en campo de Chicago y field goal posterior de Graham Gano. Touchdown de Dion Lewis en el siguiente drive de los de Joe Judge (17-10), y nuevo turnover de la defensa, la segunda intercepción que lanzaba Trubisky. Esta vez fue James Bradberry el protagonista, quien arrancó el balón de las manos a Allen Robinson, y Gano acabó saliendo al campo para sumar otros tres puntos. Los Giants se ponían a menos de a una anotación de diferencia.
Mucho habría cambiado la película si en ese último drive puntuador de los de New York hubiese acabado en un maravilloso pick six de Eddie Jackson, pero la jugada fue anulada por pass interference. Sería el RB Montgomery (82 yardas de carrera y 45 por aire) quien se encargaría de hacer más leve el martirio que estaba sufriendo su equipo en esta segunda parte, con un drive totalmente controlado por él con 56 yardas terrestres ganadas. Sin embargo, alargaron el suspense ya que Cairo Santos falló el tiro de campo de 50 yardas.
Jones podría llevar a sus Giants a su primer triunfo del año, con un último ataque a falta de dos minutos. De hecho convirtió dos cuartos downs por medio de Lewis y Engram durante el drive, aterrizando en la redzone del campo rival. Sin embargo, la última jugada iba a ser un pase incompleto a la endzone, en la que además Tate realizó un pass interference en ataque que hizo morir el partido.