Todo lo peor que podía ocurrir a un equipo en una Final de Conferencia le llegó a los San Francisco 49ers. La bonita historia de ser contendientes a la Super Bowl con un quarterback "Mr. Irrelevant" como Brock Purdy llegó a su fin, después de que cayeran estrepitosamente por 7-31 ante los Philadelphia Eagles. El propio Purdy se lesionó en el partido, teniendo que salir el cuarto QB en el roster de los 49ers. Sería un Josh Johnson que no pudo hacer nada y también tuvo que dejar el juego por una conmoción. Por su parte, Jalen Hurts hizo historia en la NFL.
Como siempre, la defensa de Kyle Sanahan cumplió (un solo sack de Arik Armstead pero 7 tackles por detrás de la línea de scrimmage y forzaron un 5/15 a los Eagles en conversiones de terceros downs). Aunque claramente si tienes a un QB que solo puede recibir snaps y poco más, se antoja tremendamente complicado ganar toda una Final de la NFC. Purdy en un fumble que le provocaron sobre el brazo se dañaba el codo teniendo que salir por no poder ejecutar lanzamientos, y de hecho terminó con solo cuatro pases en sus estadísticas.
Así, no le quedaba otra al veterano Josh Johnson de 36 años que salir y efectuar un triste 7/13 completados para 74 yardas. Un jugador que además de la NFL (ha pasado por hasta 14 franquicias), ha jugado en la UFL, la AAF o la XFL. Y para colmo, durante otro fumble, Johnson era golpeado y tenía que abandonar el terreno de juego por conmoción cerebral. Así, San Francisco tuvo que asumir desde el tercer cuarto el partido con Purdy sobre el césped y solo dando handoffs a sus corredores, sin poder pasar en ningún momento.
Las lesiones, el lastre de San Francisco en los últimos años
Además, las malas noticias en San Francisco llegaban bien temprano cuando en la segunda jugada, Fred Wagner se lesionaba y tenía que retirarse momentáneamente. Después, con un enorme catch a una mano de DeVonta Smith para 29 yardas, los Eagles ya se catapultaron en su primera serie a primera y gol. Y Miles Sanders se encargaba del primer touchdown.
Como contrapartida, ya en el primer drive de los 49ers llegaba la lesión de Purdy. Recibía un sack de Haason Reddick golpeándole el brazo mientras intentaba lanzar, y el fumble lo recogía Linval Joseph. Desde entonces, se sucedieron varios despejes de balón por parte de ambos equipos, dominando las dos defensas. Y es que la de los Eagles solo concedería (ayudado eso sí por las lesiones de quarterbacks) 168 yardas en total. Y únicamente permitieron dos terceros downs, con solo once primeras oportunidades que conseguirían los 49ers.
Así, no le quedó otra a Christian McCaffrey que tirar del carro de San Francisco y sumó 84 yardas en 15 acarreos. El running back de hecho ya en el segundo cuarto consiguió empatar con un touchdown de 23 yardas. Aunque Philadelphia contestó al siguiente drive. Empleando casi siete minutos de juego, llegaron a la redzone y de nuevo Miles Sanders cogía el ovoide para llevarlo hasta la zona de anotación, esta vez por 13 yardas (7-14).
Los 49ers perdieron 3 fumbles
Acto seguido, Johnson no era capaz de controlar un snap y se provocaba un fumble que recuperaba Reddick en la yarda 30 de San Francisco. Esa acción facilitó el 7-21 en el marcador cuando parecía que nos íbamos ya al descanso con una ventaja mínima. Boston Scott corría diez yardas para touchdown. Con ello, los Eagles sumaban 38 anotaciones de carrera en la temporada, añadiendo Playoffs. Así, igualaban la mayor cantidad de touchdowns (y superada después) de un equipo en una misma campaña. El récord databa de 1924... desde los extintos Frankford Yellow Jackets. Otra marca histórica es la de 37 anotaciones que lograrían los Green Bay Packers... en 1962. Casi nada.
Y es que el juego terrestre fue dominante para los Eagles, con 148 yardas entre especialmente Kenneth Gainwell (48 yardas), Sanders (42), Jalen Hurts (39) y Scott (21). Puesto que los 49ers no permitieron un juego de pase contundente a Hurts (121 yardas, 15/25), este se dedicó a correr como bien sabe y a dar handoffs cuando más lo necesitaban. Y los cuatro touchdowns del partido serían por tierra.
El remate llegaba en el primer drive de la segunda parte. Johnson lanzaba un nuevo pase estrepitoso intentando buscar a Deebo Samuel, pero Ndamukong Suh lo visitaba en el pocket durante su pase y quedaría golpeado de la cabeza. Una conmoción que llevaba a Johnson a vestuarios. Y, literalmente, San Francisco no tenía más quarterbacks, con Trey Lance y Jimmy Garoppolo que se lesionaron durante la regular season y dieron paso a la aventura del rookie Brock Purdy, pick nº 262 del Draft del 2022, el último.
Por ello, el propio Purdy tendría que tomar los snaps (o incluso lo hacía McCaffrey), y directamente daba los balones a sus corredores. El ataque de esta forma quedó completamente inerte ante Philadelphia.
Histórico juego de carrera de los Eagles liderado por Jalen Hurts
Culminando el tercer cuarto, los de Nick Sirianni lograrían una nueva serie larga y exitosa, casi ocho minutos para recorrer 91 yardas. Dicho drive se pudo alargar gracias a una falta de Jordan Mason sobre el punter Brett Kern en un cuarto down, que les volvió a dar el primero a los Eagles. Con carreras de Hurts, de 12 y 14 yardas, y una falta por violencia innecesaria de Talanoa Hufanga sobre el QB, se movieron las cadenas hasta las últimas cinco yardas. El mismo Hurts empujaría el balón una yarda para establecer el 7-28.
Dicho touchdown es el 15º del quarterback de los Eagles, la mayor cantidad de anotaciones de un QB en una temporada incluyendo postseason en la historia de la liga. Superaba los 14 TDs de Cam Newton logrados en 2011.
San Francisco ya entró en la desesperación como era de esperar. Nada producían en ataque, y tendrían que jugarse un cuarto down iniciado el último cuarto por la mitad del campo. El intento terrestre de Deebo Samuel acabaría en tackle for loss de Avonte Maddox. Se cambió así la posesión y pudieron sumar los Eagles un field goal de 31 yardas por medio de Jake Elliott ya definitorio en el partido. Se ponía un marcador de 7-31 y únicamente cinco minutos restantes en el reloj.
De esta forma, Philadelphia disputará su cuarta Super Bowl (1981, 2005, 2018 y 2023), y buscarán su segundo título en su historia. Aunque previamente a la Super Bowl era sumaron tres campeonatos de la NFL antes de que se unieran la AFL y la NFL en 1970 (1948, 1949, 1960).
