
Woods firmó una ronda final de 71 golpes, uno bajo el par, para asegurar su segundo título del año y colocar una bandera de alerta de cara al Másters de Augusta de abril próximo.
Tras conseguir el último putt, Woods agitó su gorra negra a la multitud que le ovacionaba a la altura del hoyo 18 del llamado campo “Monstruo Azul”.
“Jugué bien esta semana”, dijo Woods. “Fue una de esas en que me sentía bien por la manera en que yo estaba jugando y las cosas marchaban”, agregó. FUENTE