La selección española de fútbol sala conquistó el séptimo campeonato de Europa de su historia tras derrotar a Rusia por 3-7 en un partido que fue un auténtico recital español, que recupera en Belgrado el cetro continental 4 años después.
Los pupilos de José Venancio López resolvieron con asombrosa facilidad un título europeo, el séptimo de la cosecha, el que demuestra la mano de hierro con la que España gobierna el fútbol sala continental.
La goleada comenzó a los 8 minutos de juego gracias a un gol de Álex, que dio forma a la conexión murciana de ElPozo con una estrategia de saque de banda. El gol espoleó a los pupilos de Sergei Skorovich, que gozaron de sus mejores minutos hasta que Pola estampó el segundo tanto. Y llegó apenas 30 segundos después con un zarpazo de Rivillos, prácticamente la sentencia de este partido. Pola ejecutó un robo y consiguió el 0-4 antes del descanso.
En la segunda mitad, Romulo marcó para que Rusia se revitalizara en la final, pero nada cambió. Miguelín se encargó de acabar con cualquier reacción rusa . El balear concluyó el torneo con 6 goles y 4 asistencias, llevándose la bota de oro. Robinho y Milovanov marcaron los otros dos goles de Rusia, donde se interpuso Rivillos para sumar el séptimo.
Por otro lado, la selección de Kazajistán consiguió la medalla de bronce en este Campeonato de Europa de Belgrado tras imponerse a la anfitriona Serbia (2-5) en la final de consolación, que se decidió gracias al acierto de los debutantes, que encontraron en Douglas Jr. a su mejor jugador. FUENTE
Los pupilos de José Venancio López resolvieron con asombrosa facilidad un título europeo, el séptimo de la cosecha, el que demuestra la mano de hierro con la que España gobierna el fútbol sala continental.
La goleada comenzó a los 8 minutos de juego gracias a un gol de Álex, que dio forma a la conexión murciana de ElPozo con una estrategia de saque de banda. El gol espoleó a los pupilos de Sergei Skorovich, que gozaron de sus mejores minutos hasta que Pola estampó el segundo tanto. Y llegó apenas 30 segundos después con un zarpazo de Rivillos, prácticamente la sentencia de este partido. Pola ejecutó un robo y consiguió el 0-4 antes del descanso.
En la segunda mitad, Romulo marcó para que Rusia se revitalizara en la final, pero nada cambió. Miguelín se encargó de acabar con cualquier reacción rusa . El balear concluyó el torneo con 6 goles y 4 asistencias, llevándose la bota de oro. Robinho y Milovanov marcaron los otros dos goles de Rusia, donde se interpuso Rivillos para sumar el séptimo.
Por otro lado, la selección de Kazajistán consiguió la medalla de bronce en este Campeonato de Europa de Belgrado tras imponerse a la anfitriona Serbia (2-5) en la final de consolación, que se decidió gracias al acierto de los debutantes, que encontraron en Douglas Jr. a su mejor jugador. FUENTE