
Estelle Balet, de 21 años, descendía a gran velocidad por la ladera sobre su tabla, cuando se produjo una avalancha de nieve que terminó con su vida. La campeona iba equipada con un sistema de detección de víctimas de avalanchas que permitió su localización. Aún así, pese a los intentos de reanimación de los servicios de emergencia, la joven falleció en el lugar del accidente.
La joven deportista se había proclamado campeona del mundo en su especialidad por segunda vez consecutiva a comienzos de abril en Verbier (Suiza). FUENTE