El austriaco Stefan Kraft y la noruega Maren Lundby se proclamaron ganadores de la Copa del Mundo de saltos de esquí, después de que la Federación Internacional de Esquí (FIS) anunciase este jueves la cancelación de las últimas pruebas de la competición de la regularidad.
Kraft, de 26 años, que ya había ganado el Globo de Cristal la temporada 2016/2017, se proclamó vencedor de la Copa del Mundo después de que la FIS decidiese suspender la prueba de en Trondheim y las dos previstas el sábado y el domingo próximos en el trampolín gigante de Vikersund, asimismo en Noruega, por culpa, como en todo el deporte mundial, de la pandemia del coronavirus.
Después de 27 pruebas, Kraft (cinco veces ganador esta temporada) sumó 1659 puntos, 140 más que el alemán Karl Geiger y con 481 de ventaja sobre el japonés Ryoyu Kobayashi, al que sucedió en el historial de la competición.
Por su parte, Lundy alzó su tercer Globo consecutivo de la general de la Copa del Mundo, al culminar el año con 1220 puntos. El podio lo completaron dos austríacas, Chiara Hölzl 1155 y Eva Pinkelnig (1029).
La noruega conquistó 8 pruebas, y lo tuvo bastante difícil ya que Hölzl se colgó 6 oros, siendo a principios de febrero su mejor momento. También Pinkelnig mantuvo el pulso de esta competición hasta el final, consiguiendo 3 primeros puestos, 4 platas y otros 4 bronces.
Entre las tres saltadoras se han repartido todas las pruebas, a excepción de la que ganó Marita Kramer en Ōkurayama y cuando Sara Takanashi se llevó la gloria el pasado 9 de marzo en Lysgårdsbakken. FUENTE
