Un mal primer tiempo lastró las intenciones de los Dallas Stars de ponerse 2-0 por delante en la serie por esta Stanley Cup 2020. Sin embargo, ahora la eliminatoria vuelve a empatarse tras la victoria por 3-2 de los Tampa Bay Lightning.
Los de Florida trajeron nueva cara a este partido y rompieron su mala racha en power plays después de varios juegos sin lograr marcar así. Y se adelantaron con gol de Brayden Point y asistencias de Nikita Kucherov y Victor Hedman, enviando el puck a la escuadra de la portería. Cinco minutos después, los Lightning siguieron siendo eficaces en superioridad, dominando en el campo de Dallas y marcando un segundo gol. Ondrej Palat, con los dos mismos asistentes que tuvo Point, marcó casi a puerta vacía ante el mareo que estaba recibiendo Anton Khudobin (28 paradas) de lado al lado de la pista. Pocos segundos después llegaría el tercero, con un disparo lejano de Kevin Shattenkirk ante el portero kazajo un tanto desubicado.
Los Stars estaban sufriendo de lo lindo en su zona, y recibieron hasta 14 tiros en el primer periodo. Sin embargo, los texanos tuvieron más empuje en la segunda parte, como es lógico ante un marcador de 3-0 abajo. Al final, con un tiro lejano de Joe Pavelski que pasó por medio de varios jugadores, lograron batir a Vasilevskiy (27 paradas). En este periodo Dallas pasó de 6 a 19 disparos, y el portero ruso detuvo 17 disparos, además de evitar que fueran eficaces en cuatro power plays.
A los seis minutos del tercer periodo, los Stars metieron emoción al partido con el 3-2 obra de Mattias Janmark, en un ataque de tres para dos defensas y con asistencias de John Klingberg y Alexander Radulov. Pero Tampa Bay en este periodo no se encogió, e iba a tener sus oportunidades de gol. De hecho Segachev marcaría, pero la acción fue anulada por offside. Los Lightning se mostraron valientes aún yendo arriba en el marcador, y eso hizo retroceder a Dallas en el hielo, con lo que el tiempo se consumió a favor de Tampa Bay.
Hablando de individualidades, Kucherov alcanza los 28 puntos (6 goles) en esta postemporada, lo que significa el récord histórico de la franquicia de Florida, dos más de los que logró Brad Richards en los Playoffs de la Stanley Cup de 2004, cuando Tampa Bay ganó el título.
