
La pelea en el Manchester Arena había comenzado bien para el púgil español, que controló y llevó la iniciativa en el asalto inicial, pero en el segundo Quigg enganchó un golpe certero que fue el principio del fin para Martínez, quien se levantó rápidamente de la lona y luego encajó una sucesión de golpes que le derribaron de nuevo. FUENTE