Justo el día que cumplían 16 años del último anillo, los Bolton Celtics consiguen su 18º título de la NBA (1957, 1959, 1960, 1961, 1962, 1963, 1964, 1965, 1966, 1968, 1969, 1974, 1976, 1981, 1984, 1986, 2008, 2024). Con ello, vuelven a desempatar a Los Angeles Lakers (17) y a ser la franquicia más laureada de la historia de la liga.
Han dominado con pie de hierro esta temporada y refundaron ese favoritismo en los Playoffs de la NBA 2024 donde solo han perdido tres partidos en cuatro eliminatorias. Derrotaron por 4-1 en las Finales a unos Dallas Mavericks que regresaban a la lucha por el título 13 años después, en busca del que habría sido el segundo anillo de la historia de la franquicia texana.
El trofeo de MVP de estas Finales fue para el verdadero líder de estos Celtics en los Playoffs, y que no es su gran estrella, pero es su segunda gran espada, Jaylen Brown. Boston logra este título a los mandos del entrenador Joe Mazzulla, quien se convierte en el entrenador más joven en ganar la NBA desde Bill Russell (1969). Un anillo que llega a su vez a dos jugadores clásicos de la liga. Es el segundo para Jrue Holiday, tras el conseguido en 2021 con los Bucks. Y el primero para el veteranísimo y mítico Al Horford, después de haber disputado el dominicano hasta seis finales de conferencia y dos finales por el campeonato. A sus 38 años consigue la máxima gloria en la NBA.
Los Mavericks venían de salvar la blanqueada y ganar el cuarto encuentro con autoridad, dando algo de esperanzas a los de Dallas. Pero realmente fue alargar una muerte ya anunciada. Los Celtics se llevaron la serie casi por la vía rápida y conquistan un anillo que llevan persiguiendo en las últimas siete temporadas, desde que draftearon a Jayson Tatum en 2017. Desde entonces, han disputado cinco finales de conferencia y dos finales.
En el quinto enfrentamiento, Jrue Holiday salía eléctrico haciendo los seis primeros puntos de los Celtics. Y con un triple de Al Horford se ponían con un 2-9 de inicio. Además, Kristaps Porzingis volvía a estar activo para este partido tras dos sin jugar. Pero los Mavericks fueron recuperando terreno y defendiendo mejor. Tras un triple de Dante Exum, Boston aceleró para tomar un parcial de 9-0 en poco más de un minuto, con triple de Sam Hauser y contraataques finalizados por Jaylen Brown (20+8+6) y Jayson Tatum (31 puntos, 8 rebotes, 11 asistencias), 18-28.
Entonados de tres, acertaban Hauser y Brown a principios del segundo cuarto (22-34). Los Celtics estaban en su salsa. Y en la recta final del cuarto, se sumaban triples de Brown, Derrick White y de Tatum, que estaba ejemplar dando puntos y asistencias en este partido.
Mientras tanto, solo llevaban doce puntos entre Luka Doncic (28+12+5) y Kyrie Irving (15+3+9). Y otra vez, Payton Pritchard enchufaba desde el medio campo sobre la bocina para dejar un marcador de 46-67 al descanso.
La fortuna desde el triple se estaba dando en Boston como en ningún partido antes de estas finales. Encestando White y Horford, se ponían con una ventaja de +25 (50-75). Les salía de todo a los Celtics. Posteriormente, yendo de tres Josh Green, los Mavs lograban haber marcado siete puntos seguidos (59-78). Fueron los minutos de mayor incertidumbre para los Celtics que no atinaban a canasta pese a estar reboteando mucho en ataque. Aún así, los Mavs tampoco pudieron recortar distancias (67-86).
Dallas siguió sin aprovechar los momentos más flojos de Boston, y el veintenar de puntos de diferencia apenas variaba. Pasaban los minutos del último cuarto y Tatum empezaba a hacer diabluras para garantizar el nuevo anillo de los Celtics, poniendo un 78-102 a menos de cinco minutos del final tras un canastón imposible mientras le defendía Doncic.
Ya a dos minutos y medio del término, con 85-106 en el marcador, los Mavericks sentaban a Doncic y a un Irving que se recorría toda la pista para saludar y felicitar a cada uno de sus rivales, asumiendo la derrota. El resultado final fue de 88-106.
