El español demostró que pelea como el más veterano y volvió a sacar rédito de su excelente defensa, supo ser paciente a la hora de abrir la guardia de su rival, ejecutó sobresalientes combinaciones y, sobre todo, tiró de su demoledora pegada. Desde el primer asalto cerró bien su guardia para no verse sorprendido por el británico. Ambos púgiles ocuparon el centro del ring y se mostraron respeto en los primeros compases.
El aspecto físico que mostró el vasco fue imponente, todo lo contrario que Gavin. En el tercer asalto se dio rienda suelta a las hostilidades y ahí Lejarraga empezó a hacer mella en su rival merced a sus duros golpes, especialmente con los que castigó el cuerpo de su oponente. Éstos comenzaron a mermar a Gavin, que ya en el cuarto no pudo con una gran combinación del campeón de Europa del peso welter. Un upper con la derecha para rematar al inglés con la izquierda al costado, y el K.O. ya quedó certificado. FUENTE
